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Adán
y Eva — ¿mito o realidad? Una
refutación de errores de Francis Collins
y BioLogos
urante las
últimas semanas, hemos recibido numerosas
consultas acerca de la historicidad de Adán
y Eva, incluyendo preguntas por correo
electrónico que nos han llegado a
través de creation.com,1 preguntas hechas
después de reuniones en iglesias, cursos y
seminarios que hemos dado, llamadas
telefónicas durante entrevistas en la
radio, y preguntas después de conferencias.
La causa de todo esto ha sido la amplia cobertura
dada por la prensa a Francis Collins y a los otros
miembros de su organización, BioLogos.2 Collins fue el
director del Proyecto del Genoma Humano, y
actualmente ocupa el cargo de director de los
Institutos Nacionales de Salud, de modo que tiene
un peso considerable en el campo
científico. Además, Collins sostiene
que es cristiano evangélico. Cuando una
persona de su calibre habla acerca de la
relación entre ciencia y fe, la gente
presta atención.
Sin embargo, lo que dice
Collins está en directa oposición a lo
que cree CMI y a lo que la Biblia enseña con
toda claridad.3 La multitud de
preguntas que hemos recibido estos últimos
días giran en torno a su afirmación
de que no hay pruebas de Adán y Eva y que
no es posible, físicamente, que podamos
proceder de dos antecesores en el pasado reciente.
En la revista Christianity
Today aparecía el pasado mes de junio
un artículo de fondo del que extractamos
las siguientes citas: «El libro de gran venta de
Collins en 2006, The Language of God: A
Scientist Presents Evidence for Belief [4]
[El lenguaje
de Dios: Un científico presenta fundamentos
para la fe] … informaba acerca de indicaciones
científicas de que los humanos
anatómicamente modernos surgieron procedentes
de antecesores primates quizá hace 100.000
años —mucho antes del marco
cronológico de Génesis y que se
originaron en una población de alrededor de
10.000 individuos, no dos.» y «En un reciente libro
proevolucionista publicado por InterVarsity Press, The
Language of Science and Faith [El lenguaje de la
ciencia y de la fe], Collins y su coautor
Karl W. Giberson intensifican la polémica,
con el anuncio de que “desafortunadamente” los
conceptos de Adán y Eva como la primera
pareja literal y los antecesores de todos los
humanos simplemente “no concuerdan con los
datos”.»5 Y Collins no se ha limitado a
la palabra impresa, sino que ha estado
pronunciándose en este sentido por todas
partes, incluyendo una reciente conferencia que
pronunció en la Universidad de Pepperdine,
donde dijo: «No hay modo alguno en que se
pueda conseguir este nivel de variación entre
nosotros a partir de uno o dos antecesores.»6 Durante una entrevista en la
Radio Pública Nacional (de los EUA)
reiteró estas declaraciones, como
también otro miembro de BioLogos,
Dennis Venema, que dijo: «Se tendría que
postular que ha existido un ritmo de mutaciones a
una velocidad absolutamente desmesurada que ha
producido todas estas nuevas variantes en un
período de tiempo increíblemente
breve. Sencillamente, estos ritmos de
mutación no son posibles. Nos
exterminarían.»7 BioLogos ha lanzado el
desafío, y, debido a su prestigio, la
evolución teísta parece haber salido
repentinamente de su desalentador último
puesto hasta llegar a ser quizá la vanguardia
de las perspectivas alternativas del Génesis.
Sin embargo, no todos se han quedado convencidos de
la fuerza de sus argumentos. En el mismo
número de NPR, Al Mohler, Presidente del
Seminario Teológico Bautista del Sur,8
decía, «En el momento que dices
“Tenemos que abandonar esta teología para
mantener el respeto del mundo”, acabamos no teniendo
ni la ortodoxia bíblica ni el respeto del
mundo.»9 Mohler y otros como él
están dispuestos a enfrentar un significativo
desafío. ¿Por qué? Quizá
se deba a que el doctor Mohler sabe más que
la persona promedio acerca de la relación
entre ciencia y fe. ¿Podría deberse
también a que conoce más acerca de la
ciencia en general? Desde luego, Mohler tiene
razón acerca de la falta de respeto que se
recibe de parte del mundo cuando se mezcla
evolución y cristianismo. Oigamos el escarnio
procedente del archiateo
Richard Dawkins: «Pero, ah, claro, la historia
de Adán y Eva fue sólo y siempre simbólica,
¿no? ¿Símbólica?
¿Así, para ser creído,
Jesús se hizo torturar y ejecutar, en castigo
vicario por un pecado simbólico
cometido por un individuo inexistente?
Como he dicho, están ladrando enloquecidos,
además de ser malignamente desagradables.»10 Dawkins no se muerde la lengua
al tratar acerca de cristianos que también se
aferran a la evolución: «Creo que los
cristianos evangélicos lo enfocan de manera
apropiada en cierto modo, al considerar la
evolución como el enemigo. Mientras que
aquellos teólogos digamos que más
sofisticados que se sienten bien satisfechos en
convivir con la evolución, considero que
son unos ilusos. Creo que los evangélicos
tienen razón, que realmente hay una
profunda incompatibilidad entre la
evolución y el cristianismo ...»11 Yendo al fondo de la
cuestión
Es innecesario decir que
rechazo totalmente el dogmatismo de los portavoces
de BioLogos. No creo que los datos den
soporte a sus conclusiones, y me parece totalmente
injusto excluir el modelo creacionista sin siquiera
considerar cuáles serían las
implicaciones del modelo (en términos
científicos, no han propuesto una hipótesis
nula que pudiera quedar refutada por las
pruebas). He escrito varias veces acerca de
predicciones de un modelo bíblico directo,
incluyendo mis artículos sobre Adán,
Eva, y Noé en relación con la
genética moderna, El Modelo
Neutral de la Evolución y recientes
orígenes africanos, y ¿Apunta
la genética hacia una sola pareja
primordial? Hay dos cuestiones a
considerar. La primera es su exclusión de principio
de cualquier posible consideración del modelo
bíblico —siguiendo a vehementes ateos como Richard
Lewontin. La segunda es cómo
apelan a las mutaciones como la única fuente
de diversidad genética. Naturalmente
que no ha habido suficiente tiempo para acumular
toda la diversidad que vemos en los humanos actuales
si Adán
fue homocigótico en todos sus loci.15
Pero este es un argumento especioso. ¿Por
qué iba nadie a creer que Adán no
tenía ya una diversidad genética
incorporada en su genoma desde el principio? Cómo veremos, la cantidad de diversidad genética en los humanos vivos en la actualidad, junto con la distribución de alelos entre las poblaciones del mundo, es un poderoso testimonio de un Adán original. Añadamos a esto los efectos genéticos del Diluvio bíblico (con su riguroso pero corto cuello de botella poblacional) y la Torre de Babel (con su consiguiente partición de los genes que habían estado a bordo del Arca), y tendremos una buena base para explicar la historia genética de la humanidad, desde una perspectiva bíblica, a la vez que empleamos los datos genéticos disponibles hasta la fecha. Análisis de
los datos disponibles
Creo que Collins et al.
han cometido un grave error y que los datos en
realidad contradicen sus pretensiones. El resto de
mis argumentos se concentrarán en un
análisis de los datos del HapMap.16
Este conjunto de datos en particular incluye
más de 1.300 personas procedentes de 11
poblaciones mundiales. HapMap secuenció
más de un millón de
«letras» individuales
(nucleótidos) de ADN esparcidas a
través de los genomas de cada persona en el
estudio, con una distancia promedio de 2.800
nucleótidos entre las letras secuenciadas.17
Así, cubrieron una enorme proporción
de la diversidad genética humana, y estos
datos pueden usarse para abordar muchas cuestiones
acerca de la historia humana. De hecho, tengo estos
datos a disposición, y he dedicado una gran
cantidad de tiempo a analizarlos, en un intento de
construir un modelo creacionista de la historia
genética humana (¡y no estoy trabajando
en solitario!). Hay aproximadamente 10 millones
de variantes comunes en el genoma humano. La mayor
parte de las mismas (varios millones) son muy
comunes y pueden encontrarse en la mayor parte de
las poblaciones del mundo, o en todas. HapMap
escogió concentrarse en una selección
de las mismas. Cuando comencé a
analizar los datos, me llamaron la atención
varias cosas que parecían
dar soporte al modelo evolutivo. Por ejemplo, la
Figura 1 exhibe las proporciones relativas de los
alelos analizados por HapMap. Se puede ver
fácilmente que el grueso de las variantes
alélicas son transiciones18
(A/G o C/T). Éstas son químicamente (y
por ello estadísticamente) más
probables que las transversiones (A/C, A/T, C/G o
G/T). ¿Por qué están ambas
clases de transiciones bien equilibradas? Porque un
cambio de A a G en una hebra crea un cambio G a C en
la hebra correspondiente de ADN, y viceversa. Si se
suponen millones de años de mutaciones
aleatorias, uno esperaría 1) más
transiciones que transversiones, y 2) niveles
iguales de los complementos correspondientes, porque
las mutaciones deberían aparecer de forma
aleatoria en ambas hebras. Esta segunda regla se
sigue en todas las clases variantes excepto entre
A/T y CG, y se podría interpretar como una
conservación funcional de la posición
C y G en el genoma. Esto, sin embargo, no es una
prueba contraria al modelo creacionista, porque no
creo que el modelo creacionista haga
predicción específica alguna acerca de
estas proporciones.19 Un segundo tipo de
análisis que parece dar soporte al modelo
evolutivo se puede ver en la Figura 2, donde
represento las frecuencias alélicas de todas
las variantes A/G en el cromosoma humano 22 dentro
de la población CEU (humanos de ascendencia
europea). Hay una distribución continua en
esta figura, donde aparecen todas las frecuencias
posibles de A y G entre los muchos alelos. A primera
vista, esto parece reflejar millones de años
de mutación, selección y deriva
genética, porque se precisaría de un
tiempo muy largo para que cualquier nueva
mutación (que por definición comienza
a muy baja frecuencia en la población) se
acerque a nada como un 10%, por no hablar de un 40
ó 50%. George Campbell, el 8º Duque de Argyll, muy sagaz tanto en cuestiones políticas como científicas, escribió un ensayo a finales del siglo XIX en el que atacaba intensamente el «reinado del terror» que los evolucionistas habían lanzado contra todos sus oponentes. Mientras analizaba como una de las teorías favoritas de Darwin (sobre la formación de los atolones coralinos) había quedado finalmente refutada después de muchos años de estridente apoyo, decía: «Y aquí aprendemos la importante lección de que una hipótesis puede explicar de forma adecuada los datos reales, y ser sin embargo falsa».20,21 Haríamos bien en dar oído a esta advertencia, porque los datos de HapMap y los análisis de los evolucionistas teístas y ateos de estos datos no son lo que parecen a primera vista. Figura 3. Deriva genética
en sistemas haploides (p. ej., ADN mitocondrial,
en cromosomas Y, o apellidos) en pequeñas
poblaciones. A los individuos representados en
cada hilera se les asignó 0, 1 ó 2
hijos al azar (la cantidad total de hijos era
siempre 10) en cada generación. Debido a
que la población es pequeña y el
tamaño estático, la deriva ocurre
rápidamente, y en este ejemplo la
fijación se alcanza en la
generación 20. Para poder ilustrar
por qué la Figura 2 no es una
predicción de la teoría de la
evolución, consultemos la Figura 3. En esta
población teórica de 10 parejas
reproductivas, un alelo comienza con diez
variantes (A-J). Si esto fuese ADNmt sólo
aparecerían las hembras. Para mantener
constante la población, cada pareja tiene
0, 1 ó 2 hijas, aleatoriamente, cada generación. Es
fácil ver que se pierden una o más
variantes en esta pequeña población
durante las primeras varias generaciones.
Finalmente, sólo quedan dos variantes (F e
I). En la generación 12, ambas representan
la mitad de los linajes y tienen la misma
probabilidad de pervivencia, pero, debido
sólo al azar, una de ellas llega a
extinguirse. Esta es una sencilla
ilustración de la deriva genética,
pero ilustra un punto importante: la probabilidad
de que un alelo consiga la fijación es
igual a su frecuencia en cualquier punto en el
tiempo. Los alelos raros tienen mayor probabilidad
de perderse. Los alelos comunes tienen más
probabilidad de pervivencia, y tienen mayor
probabilidad de llegar a su fijación. Figura 4. Frecuencias de alelos
después de muchas generaciones en un
modelo de población humana. Esta figura
muestra cómo las mutaciones se acumulan
en una población al aproximarse a un
equilibrio mutación-deriva
genética.22
Observar la abundancia de mutaciones raras y la
ausencia general de polimorfismos por encima del
20%.
En la Figura 4 expongo los
resultados de la acumulación de mutaciones en
una población humana teórica modelada
con el programa Mendel’s Accountant.23
Este es un resultado típico que se puede
obtener usando un margen de ajustes de
parámetros, en poblaciones tanto
estacionarias como en lento crecimiento. A pesar de
varios miles de generaciones de selección y
de deriva genética, hay pocas mutaciones en
la porción central de la gráfica. Esto
se debe a la deriva. Las nuevas mutaciones son, por
definición, raras, y se encuentran en el
borde izquierdo. Así, siempre habrá
más alelos raros que comunes. Estos nuevos
alelos están siendo constantemente empujados
fuera de la gráfica hacia la izquierda por la
deriva aleatoria. La infrecuente mutación que
llega a una abundancia superior al 50% experimenta
de repente un «empuje» hacia la derecha.
Así, el centro es como una colina, donde la
deriva empuja a los alelos apartándolos del
medio en una u otra dirección. Debido a que
la mayoría de las mutaciones que entran desde
la izquierda se pierden, uno nunca esperaría
una distribución uniforme como la que
observamos en la Figura 2. Aunque la Figura 2
parece al principio dar soporte a la teoría
de la evolución, en realidad no es
así. La distribución de frecuencias
alélicas tiene demasiados alelos en la gama
media. HapMap secuenció alelos comunes de
manera premeditada, ignorando alelos raros
restringidos a ciertos subgrupos. Con ello, hizo
dos cosas: 1) reveló los muchos e
inesperados alelos en la gama media, 2) se
concentró de manera inadvertida en la
«diversidad creada» (más acerca
de esto más adelante), y 3) nos
proporcionó un maravilloso modelo de los
efectos debidos al comienzo a partir de una sola
pareja ancestral hace sólo varios miles de
años.
¿Qué
esperaríamos si la Biblia fuese cierta? ¿Por
qué
será que nadie en BioLogos parece
haber abordado el modelo bíblico?
¿Por qué han aceptado plenamente los
supuestos de la teoría de la
evolución en bloque, y han usado estas
suposiciones para llegar a fuertes conclusiones en
apoyo de dicha teoría? Su razonamiento
circular es obvio. Sin embargo, no sería
prudente detenernos aquí. Necesitamos
introducir un modelo de lo que esperaríamos
que fuese cierto si Adán realmente
vivió y si vivió hace sólo
6.000 años. En la Figura 5 represento una
curva teórica de frecuencias alélicas
para la «población» humana en la
Creación. Aquí doy por supuesto que
Eva es un clon de Adán, porque fue hecha de
una parte de la carne de Adán (aunque de
precisamente de aquel hueso específico
que puede regenerarse). En este caso,
debido a que se trataba de una hembra, el cromosoma
Y de Adán hubiera quedado excluido y se
hubiera doblado su cromosoma X, aunque esto no es
específicamente necesario genética ni
teológicamente.24 Cuando Adán y Eva comienzan a tener hijos, los mismos van a recibir un conjunto aleatorio de alelos procedentes de los padres. En el caso de dos individuos heterocigotos, esperaríamos que un 25% de los alelos en cada hijo fuese AA, que un 50% fuese AG, y un 25% que fuese GG, según las leyes de la genética que todos aprendimos en la escuela. Suponiendo que no hay ligamiento, la curva de frecuencias alélicas para cada individuo aparecería como la tenemos en la Figura 6.
Veamos lo que sucede en las
Figuras 7–9.25
Al irse añadiendo más hijos a la
población, la curva de frecuencias
alélicas a nivel de población comienza
a acercarse a la inicial línea plana de
distribución de Adán (Figura 5). Si
Adán y Eva pudieran haber tenido un
millón de hijos, la curva resultaría
perfectamente plana. Sin embargo, estuvieron
limitados respecto al número de hijos y por
ello las frecuencias alélicas tenían
que derivar en la primera generación, donde
la magnitud de la deriva dependía de la
cantidad de hijos. Seguimos estando aún muy
lejos de la distribución de HapMMap de la
Figura 2, pero es un paso en la dirección
correcta. Pero si añadimos nuevas mutaciones
a la población con el paso del tiempo, se
añadirán mutaciones de baja frecuencia
a la curva, según está modelado en la
Figura 10. Este es un paso adicional hacia la
distribución de la Figura 2.
Al llegar a este punto,
necesitamos algo más potente para modelar los
cambios en las frecuencias alélicas en la
historia humana bajo los parámetros
bíblicos. Para ello, escribí un
programa en lenguaje Perl que comienza con un
fundador (Adán) y le asigna 1.000 alelos
heterocigotos. Supongo que Eva es un clon26
y le doy el mismo conjunto de variaciones. Cuando
comienzan a tener hijos, a los hijos se les asigna
un cónyuge después de llegar a una
edad de madurez definida por el usuario. Los
cónyuges se escogen aleatoriamente de entre
todas las personas no casadas del sexo opuesto.
Supongo matrimonio de por vida. También, a
diferencia de muchos otros programas de modelado que
usan generaciones separadas, yo uso generaciones
parcialmente superpuestas. Así, una persona
puede casarse con cualquier otra del sexo opuesto,
con independencia de su edad (aunque una persona
mayor no casada es improbable) o de su
posición relacional (con la excepción
de antecesores). Debido a que estoy siguiendo
individuos, no promedios, hay una mayor exigencia de
uso de memoria, de modo que el tamaño de
población que puedo modelar es limitado. Sin
embargo, esto me permite modelar algo que
debería reflejar de manera más o menos
aproximada la historia bíblica. En este modelo de
población hay tres parámetros
principales, la edad de la madurez sexual (Ym), la edad de la
senescencia reproductiva (Ys), y el espaciado
entre hijos (Yc).
La combinación de los mismos controla la
cantidad total de hijos por familia, y esto, a su
vez, controla directamente la cantidad de deriva
en las subsiguientes generaciones (Figura 11).
Los modelos evolutivos
cultivados por BioLogos y otros dependen de la
deriva genética y de la selección
natural para influir sobre las frecuencias
alélicas. Debido a que la deriva ocurre con
tanta lentitud en una población grande, se
necesitan millones de años para explicar el
espectro de la frecuencia alélica del hombre
moderno. Pero el modelo bíblico comienza con
la población más pequeña
posible (dos individuos) y espera una rápida
deriva en la población antediluviana.
¿Qué ocurriría en el Diluvio,
algo más de un milenio y medio
después, cuando la población del mundo
quedó reducida a ocho personas, con
sólo tres parejas reproductivas, de las que
tres hombres eran hermanos? Usando los mismos
parámetros que en la Figura 11, hice una
marcha del modelo para simular 1.500 años de
casamientos y nacimientos, deteniéndome cada
500 años para reducir la población a
tres parejas fundadoras constituidas por tres
hermanos (de padre y madre) y tres mujeres
seleccionadas al azar de entre las mujeres solteras
disponibles (Figura 12). En base de la Figura 11, yo
sabía que la deriva se detendría
efectivamente en cualquier población con
crecimiento exponencial antes de los 500
años, de modo que esta parecía una
estrategia adecuada. ¿Qué
podemos aprender a partir de la Figura 12?
Primero, como antes, que la deriva tiene lugar
desde Adán y Eva (línea azul
horizontal) hasta el primer muestreo a los 100
años (línea marrón quebrada)
y casi no se detecta deriva 400 años
después (línea verde continua).
Después del año 500 aparece un
cuello de botella. Cien años
después, la población ha derivado
aún más lejos (línea de color
azul oscuro quebrada). De hecho, cada cuello de
botella empuja la distribución de las
frecuencias alélicas más y
más cerca de la media moderna.
Se debe observar también
que alguna cantidad de diversidad en Adán se
pierde después de varios cuellos de botella.
Las curvas finales tienen una cantidad significativa
de alelos que son 100% A o 100% G, lo que significa
que la variación inicial A/G en Adán
se ha perdido. Los genetistas de poblaciones
designan esto como «fijación», y
este resultado fue una sorpresa para mí, por
cuanto antes de esto yo no había considerado
que alguna de la diversidad de Adán se
hubiera podido perder de esta manera. ¿Es adecuado modelar sucesivos cuellos de botella de la población cuando la Biblia dice que sólo hubo uno? En realidad, sí, porque lo único importante es la historia de Noé y su familia. Mi modelo supone un emparejamiento al azar, pero esto es contrario a la historia y a la naturaleza humanas. Si hubo algún grado de consanguinidad (debido a la separación geográfica de la población antediluviana, a luchas entre clanes, a racismo o a esnobismo familiar, etc., etc.), habría probabilidad de deriva. Además, lo que aquí tenemos es un modelo. El propósito es exponer cuáles son las posibilidades y compararlas con lo que es probable, no hacer una declaración absoluta acerca de la historia. La conclusión es que los resultados son bien coherentes con la narración bíblica. Análisis
adicionales de HapMap Hay varias otras
maneras de analizar los datos de HapMap que nos
podrían dar información
histórica. En la Figura 13 comparo las
frecuencias alélicas de 10.000 variantes
A/G aleatoriamente seleccionadas dentro de las
poblaciones CEU y YRI (individuos de la tribu
Yoruba de África Occidental). La Figura 14
expone los intervalos de confianza del 95% de los
mismos datos. Está claro que estas dos
poblaciones procedieron de la misma
población fuente, porque la frecuencia de
cualquier alelo en una población es un
predictor adecuado de la frecuencia de dicho alelo
en la otra. También, el hecho de que cada
alelo no tenga exactamente la misma frecuencia en
ambas es un testimonio de la deriva
genética en las poblaciones después
de su separación, pero también de
que no ha sucedido tanto tiempo que se eliminase
el nexo común. Los evolucionistas aceptan
esto también, y muchos presentan la
teoría del origen en África como una
explicación. Los múltiples cuellos
de botella ocurridos en subpoblaciones cuando se
dividieron los clanes en la Torre de Babel
deberían ser la explicación
creacionista.
Uno de los propósitos del proyecto HapMap era examinar la historia de la recombinación cromosómica en la historia humana. La razón por la que comencé a trabajar sobre estos datos era ver cuánto de los genomas originales de Adán y Eva se podría observar en los datos genéticos modernos. Pero todavía no he llegado a este análisis. Esto tendrá que ser el tema de posteriores exploraciones. Por ahora, podemos quedar satisfechos con diversos hechos en favor del modelo creacionista: 1) Hay lugares en el genoma humano que no se han recombinado en toda la historia humana. 2) No hay tantos bloques de recombinación como los predichos por la teoría de la evolución (esta es una razón de que tengan un cuello de botella en los escenarios de un origen africano). Y 3) entre dos y cuatro bloques de recombinación (p. ej., la cantidad que podría ajustarse en Adán y Eva) pueden explicar más del 95% de los datos por bloques disponibles. Un aspecto en favor de los evolucionistas es su argumento de que los bloques que se encuentran por todo el mundo son un mero subconjunto de los que se encuentran en el África subsahariana, pero esta aseveración precisa de un detallado análisis. Diversidad creada
frente a las mutaciones Como se ha
detallado más arriba, uno de los argumentos
que se da desde BioLogos es que no ha habido suficiente tiempo
para acumular las mutaciones que se encuentran en
los humanos actuales si procedimos de Adán
y Eva. Un corolario a esto es que no
podríamos sobrevivir a esta clase de carga
mutacional. Pero como he observado más
arriba, esto significa suponer que Adán no
tenía heterocigosidad, lo que es una mera
suposición sin fundamento objetivo.
¿Cuánta diversidad creada
podríamos suponer? Una manera de estimarla
es contemplar la cantidad de alelos compartidos
entre todas las poblaciones mundiales. En los
datos de HapMap, cada alelo medido se encuentra en
esta categoría. Cada uno de estos es
además bialélico, es decir, tiene
sólo dos letras alternativas (A o G, C o T, etc.). Parte de
esto fue intencionado, porque los alelos de HapMap
fueron cuidadosamente seleccionados, pero es una
buena representación del estado de la
diversidad genética humana en general: la
mayor parte de la variación es
bialélica y se puede encontrar en la mayor
parte de las poblaciones. Así, en Babel
debieron haber estado presentes bastante
más de un millón de loci
bialélicos heterocigotos. Estos debieran
haber estado presentes en el Diluvio y en la
Creación unas solas diez generaciones antes
del mismo. Sin embargo, HapMap no midió
cada alelo. Por cuanto la mayor parte de la
diversidad genética conocida en la
actualidad puede encontrarse en múltiples
poblaciones en el mundo, la mayoría de la
variación debió estar presente desde
el principio.
¿Es posible que una sola
persona sea portadora de tanta diversidad?
Realicé un análisis de los datos de
HapMap para medir la cantidad de heterocigosidad
dentro de los individuos de HapMap. Las diferencias
a nivel poblacional eran ligeras, con una media
global de 4,33 ± 0,234 × 105
(± DE) alelos heterocigotos por persona.
Así, aproximadamente el 30% de todos los
alelos de HapMap son heterocigotos dentro de cada
persona. Si hay 10 millones de variantes comunes,
¡se esperaría de un solo individuo que
fuese portador de hasta tres o cuatro millones de
alelos heterocigotos! Debido a que la mayoría
de las personas son fenotípicamente normales,
no hay reducción en la aptitud asociada con
estos elevados niveles de heterocigosidad.
¿Por qué debería haber ninguna
reducción si esta variación fue creada
por Dios y diseñada en el genoma original? Mi
expectativa es que Adán tenía
alrededor de 10 millones o más de loci
heterocigotos y que cada uno de sus hijos
tenía la mitad de lo mismo. Algunos alelos, no
obstante, han sido añadidos a la
población debido a mutaciones.
¿Cuánta de la diversidad
genética se debe a las mutaciones? Dados
los 10 millones de variaciones comunes en el
genoma humano, hay muchas más variantes
«privadas» y muy raras que ocurren en
uno o unos pocos individuos en poblaciones
específicas. Estas deberían ser
mutaciones acaecidas desde el Diluvio y Babel. Con
un tiempo medio de generación (moderna) de
30 años, ha habido sólo 150 o
quizá hasta 200 generaciones en toda la
historia de la humanidad. Si adoptamos una
estimación moderna cautelosa de 100 nuevas
mutaciones por persona y generación, esto
nos da entre 15 a 20 mil mutaciones por persona.
Esta es una enorme cantidad cuando se añade
en toda la población humana, y la
mayoría de ellas deberían ser
simples (quizá sumando más que la
cantidad inicialmente creada). Sin embargo, a
nivel individual, se podría esperar que
sólo una pequeña fracción
(menos de un 0,01%) de la heterocigosidad se deba
a mutaciones. Conclusiones No es lícito
que desde BioLogos se afirme que no hay pruebas de Adán
y Eva, y ello por varias razones. Primero, sus
conclusiones se basan en supuestos evolucionistas.
No se puede aseverar lícitamente que algo
está demostrado sin poner a prueba las
suposiciones subyacentes a la aserción. De
otro modo sólo tenemos un razonamiento en
círculos y una petición de
principio, con el consiguiente rechazo de entrada
de cualquier teoría alternativa, y ello
además recurriendo a la
tergiversación de la posición
creacionista. Segundo, la mayoría de los
datos concuerdan bien con el modelo bíblico
directo, incluyendo una sola pareja inicial hace
sólo 6.000 años. Aunque quedan
algunas cuestiones por resolver con el modelo
bíblico por lo que hace a los datos
disponibles, lo mismo puede decirse de cada uno de los modelos
evolucionistas, de modo que no se puede concluir
por ello que la Biblia queda invalidada por los
datos disponibles. Se rumorea que Einstein dijo
algo como sigue: «Mil experimentos no pueden
demostrar que estoy en lo cierto. Un solo
experimento me puede refutar». Esta es una sana
lógica. Francis Collins y BioLogos deberían seguir este
consejo.
GLOSARIO ADN mitocondrial - Es un material genético que aparece en las mitocondrias (representado como ADNmt/ADNm, o bien mtDNA/mDNA en inglés). Las mitocondrias son unos orgánulos que generan la energía para las funciones de la célula. El ADN de las mitocondrias se reproduce en el seno de las mismas cuando se divide la célula eucariota, aparte del ADN del núcleo. Alelo - Cada una de las formas alternativas que puede tener un gen y que se diferencian en su secuencia y que se puede manifestar en modificaciones concretas de la función de dicho gen. Al ser la mayoría de los mamíferos diploides estos poseen dos cromosomas, uno de ellos procedente del padre y el otro de la madre. Cada par de alelos se ubica en igual locus o lugar del cromosoma. Bialélico - Perteneciente a ambos alelos; por ejemplo, los polimorfismos de nucleótido simple muestran dos formas alternas y son bialélicos. Cuello de botella - Una drástica disminución de la cantidad de representantes de un grupo en algún momento del pasado, que pueden llegar al borde de la extinción. Una consecuencia es una escasa variabilidad genética y el cambio en la antigua proporción de los alelos. También se da una aceleración de la deriva genética, al darse una selección intensa de determinados caracteres que pasan a ser mayoritarios en los individuos supervivientes, mientras que otros menos favorables se reducen o desaparecen por completo. Deriva genética - Cambios diversos que se introducen en el genoma de una población a lo largo de sucesivas generaciones. Véase también Cuello de botella. Diploide - Que posee un doble juego de cromosomas homólogos, generalmente uno procedente del padre y otro de la madre. Casi todos los mamíferos son organismos diploides. Fijación - En genética de poblaciones, fijación es el cambio en un determinado patrimonio genético desde una situación en la que existen al menos dos variantes de un gen determinado (alelo) a una situación en la que sólo queda uno de los alelos. Este término puede tener referencia a un gen en general o a una posición concreta de un nucleótido en la cadena de ADN (locus). Frecuencia alélica - o frecuencia génica, es la proporción de todas las copias de un gen constituida por una variante génica concreta (alelo). En otras palabras, es la cantidad de copias de un alelo determinado dividida por la cantidad de copias de todos los alelos en el emplazamiento génico (locus) en una población. Se puede expresar como porcentaje. Haploide - Que posee un único juego de cromosomas. Heterocigoto - Un organismo diploide es heterocigoto en un locus génico cuando sus células contienen dos diferentes alelos de un gen. Heterocigosidad - En genética de poblaciones el concepto de heterocigosidad se extiende comúnmente a la población como un todo, en el sentido de la fracción de individuos en una población que son heterocigotos para un locus determinado. Puede también referirse a la fracción de loci en un individuo que son heterocigotos. Ligamiento - La tendencia de ciertos loci o alelos a ser heredados juntos. Los alelos ubicados en el mismo cromosoma tienden a mantenerse juntos durante la meiosis, y están por ello genéticamente ligados. La recombinación cromosómica durante la profase I de la meiosis previene que alelos originalmente ubicados en el mismo cromosoma permanezcan ligados de manera permanente. Loci - Véase Locus. Locus - En genética y computación genética, un locus (plural loci) es la ubicación específica de una secuencia de ADN en un cromosoma. Una variante de la secuencia de ADN en un locus determinado recibe el nombre de alelo. La lista ordenada de loci conocidos en un genoma determinado se llama mapa genético. La cartografía genética es el proceso de determinar el locus para determinados rasgos biológicos. Polimorfismo - Término que se refiere a la existencia en una población de múltiples alelos de un gen. Así, un polimorfismo es una variación en la secuencia en una ubicación determinada del ADN entre los individuos de una población. Cuando la diferencia en secuencia codificante o reguladora en el ADN (genotipo) produce cambios importantes en la proteína o en el proceso de regulación de la expresión génica, pueden aparecer diferencias en la apariencia del organismo (diferentes fenotipos), como, por ejemplo, el color de los ojos. Senescencia reproductiva - El final de la actividad reproductiva cíclica en los primates; no se reconoce en animales domésticos. Transición - En genética, una transición es una mutación génica o puntual que cambia un nucleótido de purina a otra purina (A ↔ G) o un nucleótido de pirimidina a otra pirimidina (C ↔ T). Transversión - En biología molecular, se refiere a la sustitución de una purina por una pirimidina o viceversa. Sólo puede invertirse por reversión espontánea. Este tipo de mutación cambia radicalmente la estructura química, y las consecuencias de este cambio suelen ser más drásticas que las de las transiciones. Las transversiones pueden ser causadas por radiación ionizante y agentes de alquilación.
Lecturas
adicionales (en inglés)
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