Porciones para Peregrinos

MEDITACIONES PARA EL DÍA DE REPOSO


Seleccionado de los Escritos, Himnos, Cartas, etc., de J. N. Darby  

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“Aquellos que Él llama Suyos—

Peregrinos en escenas donde Él anduvo.”

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Seleccionado por H. G.

Cubierta


Semanas

Introducción y Prefacio
1—El Pecado

2—La Gracia

3—La Palabra de Dios

4—El Espíritu Santo

5—Las Perfecciones de Cristo

6—La Fe

7—Paz

8—Guía

9—Humildad

10—Prueba

11—Comunión

12—Conflicto

13—Devoción

14—Temores incrédulos

15—Separación del mundo

16—Gozo

17—Dependencia

18—Llevando la cruz

19—Mirando a Jesús

20—Crecimiento

21—La Presencia de Dios

22—Servicio

23—Afectos divinos (1)

24—Afectos divinos (2)

25—Renuncia al yo

26—Cánticos en la noche

27—El Varón de Dolores

28—Amor

29—La todosuficiencia de Cristo

30—Energía divina

31—Ayuda desde el santuario

32—Reposo

33—La fidelidad de Dios

34—Sumisión

35—Satisfacción

36—Cercanía a Dios

37—Recaída y Restauración

38—La luz de la eternidad

39—Nuestras necesidades y
       Su plenitud

40—Poder

41—El corazón divino

42—Santificación práctica

43—Alabanza

44—Aliento para los peregrinos

45—La voluntad de Dios

46—Empatía

47—Los atrios celestiales

48—Cristo es todo

49—Caminando con Dios

50—Confianza

51—La luz celestial
52—Nuestra esperanza

CUADRAGÉSIMA TERCERA SEMANA

ALABANZA


“Al que nos amó ...

a él sea gloria e imperio por

los siglos de los siglos.”
          Apocalipsis 1:5, 6


¡Te alabaremos, Salvador!

     Librados fuimos por tu pasión;

No podrán ningunos cantos terrenales darnos gozo

     Cual los de eterna redención.




No hay ningún otro tema de alabanza para el cielo que para la tierra; la sangre de Cristo tiene la misma eficacia en la tierra que en el cielo: aquello por lo que ellos alaban a Dios es igualmente cierto de nosotros. Sus arpas están mejor afinadas que las nuestras, pero su cántico es el mismo.

 

* / * | * \ *

 

Debemos persuadirnos de alabar solo al Señor. Solo él es digno de ser alabado, reverenciado y adorado. El cántico de los bienaventurados (Ap. 5) no alaba a nadie sino a Aquel que los redimió con Su sangre. No contiene una sola palabra de alabanza para ninguno de entre ellos. … Procuremos llevar nuestros corazones al unísono con este cántico. … Esta será nuestra felicidad ya aquí en la tierra, y contribuirá a la gloria de Dios, que es menoscabada por la alabanza que los cristianos se dan demasiadas veces unos a otros.

 

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«Bienaventurados los que habitan en tu casa; perpetuamente te alabarán.» Nada sino alabanza conviene a aquellos que habitarán en la casa de Dios; será su infatigable e inacabable actividad—una alabanza perpetua.

 

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El Señor dice: «Anunciaré tu nombre a mis hermanos; En medio de la congregación te alabaré». … ¡Que estemos en sintonía con nuestro Guía celestial! Él dirigirá bien nuestras alabanzas, y ello de manera grata al Padre. Su oído estará atento cuando oiga esta voz que nos dirige.

 

* / * | * \ *

 

En espíritu, estamos en el cielo. Estamos en Cristo, que nos llena con Su gloria y con Sus perfecciones. … La santidad y el gozo caracterizan la tierra. Ellos son los frutos que crecen allí espontáneamente, como lo son las acciones de gracias que brotan en los corazones de aquellos que están allí por el poder redentor.

 

* / * | * \ *

 

Cualquiera puede gozarse en el Señor cuando el Señor le da lo que desea. «Bendeciré al Señor en todo tiempo»; esta es la cuestión que nos pone a prueba. «Dad gracias en todo.»

 

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¿Están vuestras voces afinadas para alabar con Cristo? Él se ha ido de la ira y tinieblas de la cruz a la luz y el amor de la presencia de Su Padre, y está allí cantando alabanzas. ¿Puedes tú alabar con Él? Allí todo temblor desaparece. … ¡Oh, … cómo aquellos que le buscan van en pos de Su corazón! … Si lo buscas, Su palabra garantiza que le alabarás.

 

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El cristiano puede decir a veces: No me encuentro en un buen estado para alabar; puede, es cierto, que sea más o menos capaz de hacerlo bien, pero siempre está en un estado para hacerlo … porque Cristo es siempre suficiente para un alma pecaminosa. Sus alabanzas serán modificadas, pero siempre alabará.

 

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«Oh Jehová, tú me has examinado y conocido. … Has escudriñado mi andar y mi reposo, y todos mis caminos te son conocidos.» … Dios no está formando un pueblo para sí, sino «para Su alabanza». Él les está mostrando lo que son ellos en sí mismos, a fin de mostrarles por Su Espíritu la bendita suficiencia de Cristo para toda la necesidad de ellos.



Porciones para Peregrinos - Citas de J. N. Darby // Selección de H. G.

Título original: Pilgrim Portions - Meditations for the Day of Rest -

Selected from the Writings, Hymns, Letters, etc., of J. N. Darby
Traducción del inglés: Santiago Escuain
© Copyright 2004, SEDIN - Todos los derechos reservados

SEDIN-Servicio Evangélico
Apartat 2002
08200 SABADELL
(Barcelona) ESPAÑA
Se puede reproducir para usos no comerciales manteniendo esta nota de Copyright y la procedencia.



 

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